miércoles, 16 de abril de 2014

UNA PERSONITA ESPECIAL part. 1


Espera cada tarde el horario exacto en el que él se conectaba, su sola presencia atrás del monitor de mi PC me hacia feliz, leía atentamente y una sonrisa automática se dibujaba en mi boca.
No hacía preguntas intimidantes, no decía oraciones groseras, por el contrario, era un ser extremadamente dulce y respetuoso, ninguno de los dos nos estábamos buscando, en eso estuvimos de acuerdo desde el principio, el destino nos cruzo en el camino.
Hablábamos de él, de mí, de la vida misma, de cómo soñaba con su futuro, de sus sueños, de sus logros, de sus anhelos.
Le contaba mis miedos, mi inseguridad, mi falta de confianza, mis fracasos y mis dudas sobre este mundo.
Me daba sus consejos, era un hombre nueve años mayor que yo con mucha experiencia no solo en la vida bdsm, si no que en la vida misma.
Nos reíamos por algún chiste malo que le contaba, o alguna anécdota graciosa que le hubiese pasado.
Me emocionaba con alguna historia de alguna sumisa que hubiera tenido, e intercambiábamos proyectos de cada uno.
Eran tardes en las que el tiempo pasaba de largo, en las que pasara lo que pasara no podía faltar a ese encuentro, en las que dejaba todo en ese horario solo para encontrarme con él, aunque mas no fuese a través de un monitor.
Había veces que por una razón u otra, el no llegaba al horario acordado, la decepción y la tristeza ganaban en mi, miles de preguntas me rondaban en mi cabeza,
Pero al día siguiente, el rostro se me iluminaba nuevamente al recibir su..."HOLA, COMO VA TODO?
La despedida llegaba sin poder evitarlo, su recuerdo permanecía en mí todo el día  imágenes de ese hombre de rostro serio, jugueteaban en mi cabeza.
El verano se iba a pasos agigantados, no quería que se fuera, quería que se detuviera que la magia de cada tarde quedara intacta.
En medio de una charla, un día de febrero me dijo, "las relaciones virtuales no son mi fuerte, te quiero ver" el corazón se me detuvo, cerré mis ojos por un segundo volví a leer..... si!!!!!!!!!! Me quería ver, pero por qué?, y si no salía algo bien? y si se terminaba la magia que había entre nosotros?, las pregunta me invadieron, que hago?
Con un temblor en mis manos solo pude responderle, "bueno"...