Una calurosa mañana de un 19 de febrero, nos sorprendió perdidos en un huracán de pasiones y sensaciones encontradas.
Era esa primera vez que nos debíamos, en la que me acepto como su sumisa, y extendió su mano para guiarme, enseñarme e invitarme a caminar este camino tan desconocido junto a usted.
Fue conocernos, encontrarnos, desearnos.no nos buscamos, simplemente nos encontramos.
Día a día fue tomándome,despacio, primero mi cuerpo fue totalmente suyo, luego mi alma, a la que le entregue sin dudarlo , y finalmente mi corazón le perteneció
Es quien vive en mi piel,es la fuerza que me lleva a crecer, es mi bálsamo, quien cura mis heridas, el aire de mi cielo.
Gracias mi señor,por hacerme parte de su piel, de su cuerpo.
Mi señor llevemos nuestros sueños a ese paraíso que solo nosotros conocemos,
Gracias mi señor, por un año mas junto a usted......
